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La danza, aunque es utópico, es mi vida

La danza, aunque es utópico, es mi vida

Entrevista por Roberto Hinestrosa Crédito de la foto: Juan Diego Castillo Antonio Najarro es el director del Ballet Nacional de España desde 2011. Además de ser un gran bailarín, Najarro es un reconocido coreógrafo, y ha sabido fusionar en sus obras los diversos lenguajes que componen la danza española. ¿Qué es la danza para usted? La danza, aunque es utópico, es mi vida. Descubrí cuando era pequeño que el movimiento me hacía ser más extrovertido, más sensible y más comunicativo: mucho más que la palabra, mucho más que las acciones. Descubrí en el movimiento que algo de dentro mío salía de una manera más espontánea y más natural. Primero porque fue la danza la que me llevó a sentirme y a ser una persona diferente. Y ya después cuando descubrí lo que era la coreografía, y todos los estilos de la danza española, decidí dedicarme a eso porque me hacía sentir como persona mucho más evolucionado. ¿Qué caracteriza la danza española? Es importante destacar que la danza española no es sólo flamenco: es escuela bolera, es danza clásica española o estilizada, tenemos nuestro riquísimo folklor –al igual que existe el folklor en Colombia–, y el flamenco. Nos encontramos en una situación donde cada vez más nos estamos dejando influenciar y enriquecer por otros estilos de danza, otros estilos de música, por diseñadores de vestuario que no solo están especializados en el vestuario que viste el flamenco, y por eso nuestra danza es cada vez muchísimo más internacional. Tenemos un nivel de bailarines actualmente que dominan todos los estilos de danza: la danza contemporánea, el ballet clásico, el flamenco, el folclor en todos sus estilos y toda su extensión, que es riquísimo en España. Tenemos entonces la suerte y la posibilidad de poder defender toda la danza. Para mí, me atrevo a decirlo, el bailarín español es el bailarín mejor preparado del mundo, porque puede defender variaciones clásicas; puede defender variaciones flamencas, con todo lo que eso conlleva: de sabor, de estilo, de sello; se puede meter unas alpargatas y bailar una jota aragonesa, una muñeira gallega, es súper polifacético. ¿Qué puede decirnos sobre la danza en Colombia? Con respecto al folclor colombiano: lo que me interesa mucho y lo que me inspira es la raíz de un país. Aquí, nada más llegar y pasear por las calles de Bogotá, visitar los museos, la gastronomía, el trato, la forma de hablar, se respira y se percibe una gran raíz y una gran tradición. Como español, la tradición a través de la danza es uno de los patrimonios más ricos que tenemos, y una de las vitrinas que mejor representan a mi país. Considero que en Colombia pasa lo mismo.

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